Hacerse un tatuaje es una experiencia personal y, a menudo, emocional. Un buen amigo puede hacer que la experiencia sea mejor y más fácil, pero puedes tener problemas si traes a la persona equivocada.
Si todavía está tratando de averiguar si debe llevar a un amigo a su próxima cita de tatuaje, siga leyendo para conocer todos los pros y los contras.
Índice de contenidos
Ventajas de llevar a un amigo a tu cita de tatuaje
Hay muchas buenas razones para traer a un amigo contigo a tu cita de tatuaje.
Apoyo moral
Incluso si ha decidido hacerse un tatuaje, la idea de la experiencia puede ser estresante. Es posible que tengas miedo especialmente si es tu primer tatuaje. Un amigo puede ofrecerte apoyo moral, desviar tu atención y ayudarte durante el proceso.
Consejo
Si su amigo se ha hecho un tatuaje antes, puede ofrecerle un consejo invaluable. También pueden ayudarlo a comprender qué esperar y manejar sus expectativas. Además, es probable que puedan ayudarlo a descubrir qué preguntas debe hacerle al tatuador.
Es posible que tu amigo pueda ofrecerte una segunda opinión, lo que puede ser útil si aún no estás seguro de lo que quieres. Puedes pensar que una imagen específica se verá genial en un lugar particular de tu cuerpo, aunque tu amigo puede tener una idea diferente. A veces ayuda tener una segunda perspectiva. Tu amigo podría identificar algunos puntos válidos.
Desviación
Hacerse un tatuaje es un proceso doloroso y lento. La situación puede empeorar si no tienes nada que hacer más que concentrarte en el dolor. Un buen amigo puede ayudarte a distraerte de la aguja y hacer que el tiempo pase un poco más rápido.
Desventajas de traer a un amigo a su cita de tatuaje
Así como hay muchas razones para traer a un amigo a su cita de tatuaje, hay muchas razones para no traer a un amigo.
Un amigo sabelotodo
Si tienes un amigo que se considera un experto en tatuajes y tal vez incluso tenga varios propios, es posible que no quieras llevarlos contigo cuando te tatues. Si tu amigo es del tipo franco, es más probable que le diga al tatuador cómo hacer su trabajo. Lo último que quieres es un tatuador molesto.
Si tu amigo no te apoya
Si tu amigo piensa que hacerse un tatuaje es una mala idea, es posible que no quieras llevarlo contigo. El día de su cita no es el momento para que un amigo le diga por qué está tomando la decisión equivocada. Solo quieres traer a un amigo que apruebe tu decisión y estará allí para apoyarte, no para hacerte cambiar de opinión.
Desviación
Si bien tener un amigo que sea una distracción para ti puede ser algo bueno, tener un amigo que actúe como una distracción para el tatuador puede ser malo. Si tu amigo hace algo para desviar la atención del tatuador de su trabajo, podrías terminar con un tatuaje menos que estelar.
Demasiada gente
Nunca es una buena etiqueta traer a más de una persona contigo. La mayoría de los salones de tatuajes no tienen suficiente espacio para acomodar a todo tu equipo. Demasiada gente también servirá como una distracción para el artista del tatuaje.
Si tu amigo es irrespetuoso con el espacio del artista
No querrás traer a un amigo que tendrá problemas para quedarse quieto durante el entintado. Muchos artistas del tatuaje trabajan en un espacio pequeño, por lo que necesita un amigo que no se mueva y se interponga en el camino.
Qué hacer si decide llevar a un amigo a su cita de tatuaje
Si decide traer a un amigo, en primer lugar, asegúrese de que su artista del tatuaje esté de acuerdo con esto. Puede que no haya sitio para tu amigo o que tu tatuador prefiera no tener una distracción extra. No querrás empezar con el pie izquierdo, sorprendiendo a tu artista con un visitante inesperado.
En segundo lugar, es mejor establecer algunas reglas básicas incluso antes de llegar al salón de tatuajes. Asegúrate de que tu amigo comprenda que has tomado una decisión sobre lo que obtendrás y lo que planeas obtener. Tu amigo debe entender que no está ahí para ofrecer una opinión.
También debes asegurarte de que tu amigo entienda que debes respetar al tatuador y su espacio.
Conclusión
Tener un amigo contigo mientras te haces un tatuaje puede ser una experiencia positiva o negativa. En algunas situaciones, tu amigo puede servir como apoyo moral y tomarte de la mano durante el doloroso proceso. Es posible que tu amigo incluso pueda ofrecerte valiosos consejos.
Por otro lado, tu amigo también puede ser una distracción y una molestia para el tatuador. Tu amigo puede ser irrespetuoso con el artista y su espacio, causando aún más problemas. Si tu amigo está en contra de que te hagas un tatuaje, su actitud puede arruinar toda la experiencia.
Antes de traer a un amigo contigo, debes sopesar los pros y los contras. Piensa en tu amigo en particular y su personalidad. Idealmente, la experiencia debe ser un momento especial para usted y debe ser lo más pacífica posible.