Es posible que esté reflexionando sobre los días en que lucía un elegante anillo para el ombligo, tal vez con incrustaciones de gemas o una variedad de formas y colores metálicos. La gran idea de los piercings es poder quitarlos cuando quieras. En raras ocasiones, el único remanente es una pequeña marca; sin embargo, nuestros piercings pueden cerrarse por causas inesperadas.
Volver a perforar el ombligo no es un problema. Las razones para hacerlo incluyen:
- Rechazo o migración de joyas
- Desgarro o estiramiento
- Infección o alergia
- Retiro o cambio de joyas
Índice de contenidos
¿Por qué se cerró y se puede rehacer?
Los ombligos vienen en todas las formas, formas y tamaños, que es siempre lo primero que observará el perforador para una perforación. En casos raros, el perforador podría haber sido subcalificado o no haber tenido en cuenta las circunstancias individuales, lo que resultó en una punción y joyas antihigiénicas y de baja calidad.
Hay muchas razones por las que un piercing puede cerrarse, y al inspeccionar el ombligo, puedes ver si otro aro en el ombligo es una buena idea.
Rechazo o migración de joyas
La perforación original podría haberse cerrado ya que la posición de la joya cambió ligeramente de la ubicación perforada original a un área más alta, más cercana a la superficie o más inclinada. Debido a los resultados mencionados anteriormente y probablemente algo de hinchazón, enrojecimiento y secreción, es posible que haya decidido quitarse la perforación y dejar que se cure o se cierre. Si este es el caso, estás limitado a volver a perforarte el ombligo.
Las razones por las que esto puede haber ocurrido es que su cuerpo, siendo el sistema inteligente y saludable que es, notó un material extraño y respondió para eliminarlo. Esto puede materializarse si lo golpea de manera inusual, creando movimiento y solicitando una respuesta sistemática.
En casos severos de rechazo o migración, puede tener una gran cantidad de tejido cicatricial en la zona anterior. Si es así, es recomendable no volver a perforar esta zona ya que la piel está traumatizada; el rechazo puede volver a ocurrir y es probable que se produzca un desgarro.
Afortunadamente, tiene un área superior e inferior de su ombligo que se puede perforar, si no se recomienda que vuelva a perforar el tejido cicatricial anterior.
Rasgar o estirar
Podría ser muy doloroso si un hilo de tela queda atrapado en tu piel mientras te cambias de ropa. Lo sabemos, hemos estado allí, ¡ay!
Cualquiera que haya tenido un anillo en el ombligo está familiarizado con esta situación o cualquier otra que pueda provocar el movimiento de sus joyas. Numerosas veces, no se hizo daño. En otros casos, el agujero se ensanchó o la joyería se desgarró por completo de la piel, lo que le provocó una lesión y un asiento en la sala de espera para algunos puntos.
Algunas personas optan por estirar metódicamente los piercings para que quepan en joyas más grandes; esto es menos posible con los ombligos y puede resultar en desgarros. Similar a lo anterior, el tejido cicatricial es común después de este tipo de trauma, y volver a perforar puede ser difícil y problemático.
Infección o Alergia
Las infecciones y las alergias son las principales razones por las que las personas se quitan las joyas, como resultado de un equipo de perforación sucio o de un cuidado posterior deficiente. En otros casos, es posible que haya tenido una reacción a la calidad del metal oa una solución desinfectante.
Si sabes que eres sensible a cierto metal, puedes volver a perforarte el ombligo. Solo informe al profesional, y él debería poder darle una alternativa de metal adecuada. Si experimentó una infección grave en su perforación anterior, debe verificar el nivel de tejido cicatricial; es posible que el rechazo haya comenzado antes de que lo retire. Su perforador podrá informarle sobre la mejor decisión.
Eliminación o cambio de joyas
Su experiencia previa de quitarse la perforación del ombligo puede deberse a situaciones en las que:
- Para evitar una lesión durante el ejercicio, se quitó las joyas
- El piercing se cayó desapercibido
- Ignoraste el consejo de no cambiar las joyas.
Si por alguna razón, el agujero se cerró, es posible que tengas miedo de empujar la barra. Mantén ese miedo: lo mejor es conseguir la ayuda de un profesional y mantener limpia la nueva perforación. Puede ser frustrante esperar meses para que sane y necesitar volver a perforarlo; sin embargo, esta es la situación más fácil de arreglar.
Después de años de tener un anillo en el ombligo, es probable que te lo hayas quitado, pero en algún momento más adelante, existe la posibilidad de que lo quieras recuperar. En esta situación, el agujero puede haberse hecho más pequeño, pero el paso puede estar libre de un lado a otro. Aquí, un profesional puede ayudar a abrir el área para colocar un nuevo anillo de ombligo.
Señale su decisión
Si elige continuar con la perforación, consulte todas sus opciones para un perforador corporal profesional, higiénico y altamente calificado. Cuando llegue, haga preguntas sobre los metales de sus joyas y pídales que revisen la piel previamente perforada; cualquier experto en perforaciones lo hará de todos modos.
Si desea asegurarse de que su perforación sane lo mejor posible, es imperativo que siga de cerca los consejos de cuidado posterior de su perforador y asegúrese de invertir en una solución de cuidado posterior de alta calidad para ayudar a la recuperación.
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